viernes, 16 de agosto de 2013

Desafío Santacolomeño en Calatayud



Lucas Carrasco


Imanol Sánchez en el tendido

Una tarde más iniciamos otro de nuestros viajes en busca de la Casta. En esta ocasión nos desplazamos hasta la localidad zaragozana de Calatayud para presenciar un desafío santacolomeño. Seis utreros procedencia Santa Coloma, se trata de dos novillos de La Quinta, dos de Los Maños y otros de dos de Ana Romero.


Miguel Cuartero


El banderillero zaragozano Carlos Esteban


La tónica general de la novillada fue un tanto decepcionante, muy bajita de casta y alguno de los novillos con muy poca fuerza, pero también vimos cosas interesantes.
El lote de La Quinta pasó por Calatayud con más pena que gloria. En general sus dos novillos pecaron de falta de celo y poca humillación, si bien es cierto que, sobre todo, al primer novillo le aplicaron una lidia desastrosa que pudo acusar en el comportamiento en el último tercio.
Los ganaderos aragoneses de Los Maños embarcaron dos novillos de diferentes hechuras y diferente condición, su primer novillo fue un novillo, grandote, altito, basto y con pocas hechuras condesas, embistió como estaba construido, sin ninguna codicia, sin ninguna ni clase, sin embargo el segundo sí que estaba en el tipo, novillo con mucha clase humillando mucho. Pegó dos volteretas en el primer tercio, clavando los pitones en el albero y dando la vuelta de campana, sin duda semejantes costalazos los acusó en el último tercio. A la postre fue el mejor novillo de la tarde y el que propició que Pepe Marcuello se llevara el trofeo del desafío.
En cuanto a la ganadería de Ana Romero hay que decir que envió dos novillos de preciosa lámina, muy en el tipo Santa Coloma. El primer novillo tuvo una clase extraordinaria, para soñar el toreo, pero la misma dosis de clase que tuvo la tenía en falta de fuerza, se derrumbó en los dos primeros tercios y la casta que atesoraba le hizo venirse arriba en el tercio de muleta, con todo fue un novillo que mereció más firmeza y más temple. El segundo ejemplar no tuvo la misma condición que su hermano, tampoco le dieron una lidia acorde con su comportamiento inicial y quedó áspero y con la cara arriba.
Muy bien presentada la novillada y bajita de casta la presenciada en Calatayud.



El lote de La Quinta



Los dos de Los Maños



Los utreros de Ana Romero


Los encargados de estoquear los utreros fueron, el gaditano Fran Gómez, el aragonés Miguel Cuartero y el castellonense Vicente Soler.
A Fran Gómez le correspondieron en suerte el primero de La Quinta y el pimero de Ana Romero, poco podemos achacarle al novillero en su primer novillo, su cuadrilla lo maltrató en la lidia y a la muleta llegó como llegó, el chaval  estuvo a la altura del comportamiento incierto del novillo, en su segundo quizá tanta clase le sorprendió y dejó escapar un triunfo.


Fran Gómez en su primero


Fran Gómez en su segundo


Al novillero de Figueruelas Miguel Cuartero hacía tiempo que no le veía y me sorprendió gratamente su evolución a un toreo reposado y con gusto. Enlotó el primero de Los Maños y el segundo de La Quinta, en definitiva el peor lote, con todo en su segundo novillo pudimos degustar un toreo bueno, sobre todo por el pitón izquierdo que malogró con los aceros, interesante actuación del novillero zaragozano.


Cuartero con problemas en su primero



Dos buenos muletazos de Cuartero en su segundo


Vicente Soler  fue el triunfador de la tarde, su toreo bullanguero y efectista caló en los tendidos, sobre todo en los de sol poblados pos las peñas. Estoqueó el buen primero de Los Maños y el segundo de Ana Romero. El primero de sus novillos mereció más reposo y más gusto toreando, demasiado acelerado y abusando del toreo efectista, Al novillo de Ana Romero no le dieron la lidia que requería y llegó a la muleta echando la cara arriba y acortando el viaje, a este le recetó una estocada rápida y mortal de necesidad y, como digo, se proclamó triunfador de la tarde.


El primero de Los Maños haciendo el avión en la muleta de Vicente Soler


Vicente Soler ante en de Ana Romero



Por último desde estas líneas animamos al representante de la empresa de Calatayud, Alberto García a seguir en esa línea, si bien es cierto que el resultado de la novillada no fue el que todos esperábamos, con iniciativas de este tipo es como, al menos, se intenta recuperar afición y atraer a los aficionados a las plazas

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